Los alumnos con TDAH (trastorno por déficit de atención e hiperactividad) pueden presentar problemas en el aprendizaje que son parte del mismo trastorno. A pesar de que su capacidad y nivel intelectual resulten normales, estos alumnos aprenden de distinta manera. Esto provoca un bajo rendimiento y retraso en sus materias escolares.

Algunas de las dificultades que pueden presentar estos alumnos son las siguientes:

• Problemas para mantener la atención en la tarea, sobre todo en aquellas que requieran de un nivel de atención prolongado.
• Debido a la impulsividad, realizan la tarea de forma rápida y precipitada cometiendo de esta forma errores por descuido.
• Problemas en la memorización de los contenidos debido a, entre otros factores, la afectación de la memoria de trabajo y la falta de atención.
• Dificultades en la planificación del tiempo, tanto escolar como socio-familiar.
• Dificultades de organización, del material escolar, entrega de trabajos, exámenes entre otros.

Dificultades a la hora de seguir las instrucciones marcadas por el profesor.

Por todo ello, resulta imprescindible que los maestros conozcan estas dificultades para que así puedan otorgar una respuesta educativa individual y personalizada de calidad que beneficie las necesidades de los alumnos durante todo el proceso de enseñanza-aprendizaje.

Una de las partes de dicho proceso es la evaluación donde se conoce el método por el cual el alumno puede obtener un mejor aprendizaje.

Resulta necesario el uso de ciertas estrategias que complementan la evaluación, de ésta manera los alumnos que presentan TDAH podrán conseguir el éxito académico.

A continuación se describen algunas de éstas estrategias que pueden llevarse a cabo:

• Realizar la evaluación que mejor se adecue al alumno (oral o escrito) desarrollando preguntas cortas.
• Entregar al alumno el examen por escrito, prescindiendo de la copia y el dictado, con el fin de evitar errores durante el proceso.
• Para aquellos alumnos que presenten problemas con la escritura se deberá permitir la realización de la prueba de forma oral o mediante un procesador de textos.
• La prueba se deberá programar con suficiente antelación para que los alumnos puedan organizarse.
• No se deberán programar dos exámenes para el mismo día evitando así el sobreesfuerzo. Se recomienda realizarlos a primera hora de la mañana para su mayor rendimiento.

Incluso podría permitírsele realizar el examen en dos partes, una por la mañana y la segunda por la tarde.

• Se debe realizar un seguimiento durante los exámenes, como recordarle el tiempo que le queda para finalizar el mismo, utilizar cronómetro, entre otros.
• Asegurarse de que haya comprendido bien las preguntas del examen al igual que se deberá verificar que haya respondido todas las preguntas; pedirle al final que revise todas las respuestas antes de hacer la entrega.
• Debemos permitirle moverse o incluso ponerse de pie durante el examen debido a que su actividad motora no le permite quedarse sentado durante la totalidad de la duración del examen, además de la falta de atención prolongada.

Lucía Osorio Quintana. Psicopedagoga de Fundación CADAH (2015). “Alumnos con TDAH: Estrategias para la evaluación escolar”https://www.fundacioncadah.org/web/articulo/alumnos-con-tdah-estrategias-para-la-evaluacion-escolar.html